9 de diciembre de 2008

Sólo quería que se la chupase...

La otra noche, después de mondo, llegue a casa con un pedo considerable. ¿Qué raro no? La verdad es que follar a esas horas por el bakala es un poco complicado, así que decidí bajarme a la calle a dar una vueltecita a ver qué ganado podía subirme a casa.

Cuando conseguí llegar a la calle pelayo, entre mareos y arcadas, me puse a mear. Puede sonar a típico: te la sacas y haces que estas meando y cuando se acerca un chulazo te la meneas y buda dirá. Pero en realidad me estaba meando de verdad, tenía que echar una botella de negrita que estaba destruyendo mi cuerpo.

Pues eso, me pongo a mear y a lo lejos, pero cerquita, aparece un chico de estatura media, raza desconocida, con pantalón rollo "Salsa" y sudadera gris básica de "H&M", con la capucha puesta, hacia mí. Cuando lo tenía más cerca y observaba que por sus rasgos era rollo moro o rollo vete tú a saber de dónde, pensé dos cosas: este tío viene a robarme o este tío viene a que se la chupe y luego a robarme.Yo no soy racista ni estereotipo a la gente... ya he dicho que bebo "negrita". Bueno, pues el tío se pone a mi lao y se la saca también. Menudo pollón, ¡mamma mia! Y yo, que no me corto un pelo cogí mi polla, me la guarde y estiré mi brazo hacia esa polla negra.

No se qué paso después, no recuerdo bien, pero el tío se vino a mi casa. Estaba un poco nervioso el tío. Yo bien ciega y bien divina. Y nada, lo típico: cómo te llamas, de dónde eres, de dónde vienes, dónde quieres que te la coma... Pues nada, yo ahí haciendo los castings de OT, Popstars y Factor X a la vez y cuando ya me pongo bien salida y quiero que me folle, me dice que no, que es hetero y que cuando está pedo sólo le apetece que se la coman, que no le gusta follar a tíos. ¿Creéis que me iba a dejar así? Los cojones. Empecé con mis técnicas (que ya os contare otro día) y el tío me dijo: ¡date la vuelta que te voy a romper ese culito! Pero aquí viene el problema: no tenía condón.

Yo, seré muy puta, pero a mí no me la meten sin condón. Así que cogí, baje a casa de mi vecino del 1º, que es una marica venezolana que vive con dos caniches que los lleva, a los pobres, pintados de rosa y morado, y le pedí un preservativo. Y nada, subí a casa (ahora que lo pienso, ¿qué coño hago dejándolo solo en mi casa?) y nada, a trotar.Una vez que lo eché to pa fuera, pues lo que todos sabéis: vístete y vete. Y el tío que si ven y túmbate y relájate, que si estoy muy perdidito y que haber si me va a tener que cuidar él, que si besitos en la frente... jajajajajajaja. Bueno, mira, el polvazo que me dio se merecía ese ratito de "no sé qué".

Pero, a los 10 minutos, que si bostezo por aquí, que si mañana tengo clase, que si me voy a dormir... El tío se viste y se dispone a marcharse pero justo, ya en la puerta, cuando voy a echarle, digo a despedirle, le miré fijamente y pensé: madre mía, menudo chulazo no?. Así que le empujé a la escalera, me puse de rodillas y se la comí otra vez.

Es que no puedo para de crear, no puedo parar de dar placer.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me recuerdas a Brian Kinney
apasionantes tus historias:)
a ver si algun dia nos vemos...
rawr!

ces dijo...

me recuerdas a mi, cuando tenia 20 :)...